La celiaquía es un trastorno autoinmune que afecta al aparato digestivo. Se desencadena por el consumo de gluten, un tipo de proteína que se encuentra en el trigo, la cebada y el centeno. Cuando una persona celíaca ingiere gluten, su organismo genera una respuesta inmunitaria que ataca al intestino delgado. Esta respuesta puede provocar diversos síntomas, así como complicaciones de salud a largo plazo.
Signos y síntomas
Los síntomas comunes de la enfermedad celíaca incluyen
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Distensión abdominal
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Diarrea
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Estreñimiento
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Dolor abdominal
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Pérdida de peso inexplicable
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Fatiga
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Anemia
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Retraso del crecimiento
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Erupción cutánea
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Dolor articular
Causas
La celiaquía está causada por una reacción al gluten del trigo, la cebada y el centeno. Esto desencadena una respuesta inmunitaria en el organismo, que ataca al intestino delgado. Esta respuesta inmunitaria puede provocar inflamación, daños en las vellosidades (las pequeñas proyecciones del intestino delgado que absorben los nutrientes de los alimentos) y otros problemas digestivos.
Factores de riesgo
Los factores de riesgo de la enfermedad celíaca incluyen
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Tener antecedentes familiares de enfermedad celíaca
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Padecer otro trastorno autoinmune, como diabetes tipo 1 o enfermedad tiroidea
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Tener ascendencia europea
Prevención
No hay forma de prevenir la celiaquía, pero sí de reducir el riesgo de padecerla. Entre ellas se incluye evitar los alimentos que contienen gluten, como el pan, la pasta y la bollería elaborados con trigo, cebada y centeno.
Diagnóstico
La celiaquía se diagnostica mediante una combinación de análisis de sangre, biopsias y pruebas genéticas. Los médicos también pueden recomendar una dieta de eliminación para ayudar a identificar los alimentos que pueden contribuir a los síntomas.
Tratamiento
El principal tratamiento de la celiaquía consiste en seguir una dieta sin gluten. Esto significa evitar todos los alimentos que contengan gluten, como el pan, la pasta y la bollería elaborados con trigo, cebada y centeno.
Superación y apoyo
Vivir con la enfermedad celíaca puede ser difícil. Puede ser útil unirse a un grupo de apoyo y hablar con otras personas que estén experimentando problemas similares. También es importante encontrar formas de controlar el estrés, como hacer ejercicio, meditar o hablar con un terapeuta.
Complicaciones
Las complicaciones de la celiaquía pueden incluir desnutrición, anemia, osteoporosis, infertilidad y daños nerviosos.
Vivir con celiaquía
Vivir con celiaquía puede ser un reto, pero es posible controlar la enfermedad. Seguir una dieta equilibrada sin gluten, evitar los alimentos que lo contienen y encontrar formas de controlar el estrés pueden ayudar a los celíacos a llevar una vida feliz y sana.
La celiaquía es un trastorno autoinmune que afecta al aparato digestivo. Se desencadena por el consumo de gluten y puede provocar diversos síntomas y complicaciones de salud a largo plazo. El tratamiento implica una dieta sin gluten, así como otros cambios en el estilo de vida. Con el tratamiento y el apoyo adecuados, los celíacos pueden llevar una vida feliz y sana.
